No es casualidad que Independiente esté evaluando la posibilidad de hacer un esfuerzo económico para comprar parte de su pase (el 80% está tasado en 2.500.000 dólares). Facundo Parra, la figura de ayer, despierta el interés de todo el mundo Rojo. Pero la cosa no se presenta tan sencilla, porque ya le pusieron el ojo desde algunos clubes de Europa, una tentación para cualquier futbolista. “Ojalá pueda seguir jugando acá. Me siento muy cómodo y siempre me han tratado muy bien”, dijo el delantero tras la victoria.
Parra es el goleador del equipo con seis gritos y ayer pudo haber aumentado su tabla personal, pero el asistente Sergio Zoratti anuló la jugada por una supuesta posición adelantada. “Sabía que estaba habilitado, pero ni protesté para no perder tiempo”, contó. Sin embargo, aunque no pudo convertir fue clave aportando desde otro lado: asistió a Lucas Villafáñez en el segundo gol, sacándose dos hombres de encima. Un rato antes, había salvado en la línea lo que hubiera significado el empate de Estudiantes, tras un testazo de Leandro Desábato. “Vi que cabeceó solo y fui a cerrar. Por suerte, la pude sacar”, explicó contento el delantero.
Y eso que antes del partido lo probaron porque tenía una molestia muscular... “Jugamos muy bien. Me gustó muchísimo el equipo. En el primer tiempo los primeros diez minutos, nos manejaron bien la pelota pero después fuimos contundentes”, analizó Parra, que jugó para deleitar a más de uno y, por qué no, conquistar el Viejo Continente. Salvo que el Rojo rompa el chanchito.
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